LEÑA DE ENCINA

La encina es un árbol que se caracteriza por su gran altura (puede superar los 20 metros) y también por contar con una de las leñas más duras. Es una madera densa lo que proporciona múltiples usos.

Actualmente uno de esos usos de la leña de encina es cocinar y crear brasas para las barbacoas y restaurantes, debido a su larga duración y consistencia a la hora de encender un fuego.

También, aunque en menor medida este tipo de leña es usada como principal combustible en nuestros hogares, convirtiéndose así junto al carbón vegetal en una forma de calefacción para nuestras casas.

Dependiendo del tipo de estufa o chimenea recomendaremos leña de olivo o encina. Si tienes una cocina campera o una chimenea abierta, sin duda encina. El aporte de oxígeno que reciben este tipo de chimeneas es muy grande lo que hace que se consuma mucha más madera. La madera de encina se consume un poco más lentamente.

Es un tipo de madera dura y muy resistente a la humedad. Además, arde lentamente, genera mucho calor y su precio es asequible. Posee un olor característico al cortarlo. Se considera como la mejor leña para barbacoas, aunque también se puede utilizar para chimeneas donde se hace un uso de forma diaria.

Se considera un tipo de madera densa que pertenece al grupo de leñas duras y se caracteriza por su consistencia y durabilidad, lo que favorece en la preparación de buenas brasas para cocinar.

Este tipo de leña destaca por su alta densidad y por su larga duración. La combustión de la leña de encina es más lenta y se consume prácticamente sin llama.

Una de las grandes ventajas al igual que la leña de olivo y la leña de roble de este tipo de leña es su coste, ya que es una leña barata que se puede adquirir a un precio muy económico.